26 de julio de 2021
Nuevo panorama de la UNESCO sobre el impacto económico del COVID en las industrias creativas
Las industrias culturales y creativas (ICC) han sido uno de los sectores más afectados por el COVID-19. El impacto de la pandemia se ha dejado sentir particularmente en las actividades basadas en recintos, como el teatro, la música en vivo, los festivales, los cines y los museos. En todo el mundo, los medios de vida de artistas y trabajadores culturales también se han visto profundamente afectados por los cierres y las medidas de alejamiento físico, lo que ha agravado sus ya precarias condiciones.
En el contexto de la necesidad urgente y sin precedentes de medir el alcance de las repercusiones económicas y financieras de la crisis, las herramientas estadísticas tradicionales y los métodos estándar de previsión se han mostrado poco adecuados. Esta dificultad ha sido aún mayor en las industrias culturales y creativas, que históricamente se han enfrentado a importantes retos de recopilación de datos y que se caracterizan por un alto grado de informalidad.
Basándose en una revisión internacional de estudios publicados en 2020, este nuevo estudio de la Unesco ofrece una panorámica de la magnitud prevista de la perturbación mundial causada por la propagación del virus, examinando el impacto económico de la pandemia en las industrias culturales y creativas.
A pesar de las dificultades inherentes a los datos culturales, este estudio ofrece estimaciones fiables del impacto económico de la pandemia en estas industrias, en 20 economías de tamaño medio y grande, que en conjunto representan el 61% de la economía mundial.
Se calcula que en 2020 se ha producido una contracción global de 750.000 millones de dólares del valor añadido bruto de las industrias culturales y creativas en todo el mundo, lo que representa un dramático retroceso en la capacidad de estas industrias para impulsar el desarrollo cultural, económico y social. Las pérdidas de ingresos en las industrias culturales y creativas en 2020 son también particularmente significativas, y oscilan aproximadamente entre el 20 y el 40% en los distintos países.
Esta contracción, a su vez, provocó un grave desequilibrio en el empleo mundial. Se registraron pérdidas masivas de puestos de trabajo en las industrias culturales y creativas, estimadas en más de 10 millones, y afectando profundamente a los medios de vida de los trabajadores creativos. Los trabajadores independientes han experimentado mayores niveles de pérdida de ingresos y desempleo que otras categorías de trabajadores culturales y creativos, lo que demuestra la urgente necesidad de defender y reforzar los derechos sociales y económicos de artistas y profesionales de la cultura en todo el mundo.
La aceleración de la transformación digital en las industrias culturales y creativas es otra tendencia clara que ha surgido de la crisis. Tanto el público como los profesionales de la cultura están utilizando las tecnologías digitales de forma novedosa, lo que ha provocado la aparición de modelos innovadores de producción, distribución y consumo digitales.
Esta investigación permite tomar consciencia de la necesidad de invertir en creatividad, proteger la condición de los artistas y garantizar una transición digital justa. Se trata de pasos esenciales para avanzar en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de UNESCO, especialmente en su ambición de promover el trabajo decente y construir sociedades pacíficas e inclusivas en las que se protejan las libertades fundamentales de todos los ciudadanos.
Descarga el informe AQUÍ.
Fuente: UNESCO