Como cada año, Game Developers Conference (GDC), la feria de videojuegos más importante del mundo, se desarrolló en San Francisco, California a fines de marzo. Si bien fue la octava vez consecutiva que Chile participó en el evento, algo escapó de la norma: el grupo de 41 desarrolladores que viajó a Estados Unidos, representando a un total de 23 empresas dedicadas al mundo de los videojuegos en el país, fue la delegación local más grande que haya ido nunca al evento –y la más imponente a nivel latinoamericano–, con un stand de 33 metros cuadrados para promover sus juegos y proyectos.
“A través de esta estrategia, Chile se ha posicionado como un referente iberoamericano con alta creatividad y calidad de desarrollo, además de ser el único país sudamericano que se ha presentado ininterrumpidamente en las ferias más importantes del sector”, cuenta Fanny González, Coordinadora Sectorial de Industrias Creativas de ProChile, entidad gubernamental que a través del Departamento de Economía Creativa ha apoyado activamente la asistencia de estos grupos a los eventos internacionales más relevantes: GDC, Casual Connect Europa, Gamescom, Tokio Game Show y MIGS Montreal, permitiendo al talento local abordar mercados clave como Estados Unidos, Londres, Japón, Alemania y Canadá.
Actualmente, las empresas dedicadas al rubro sobrepasan las 60 a nivel nacional –según datos de ProChile–, con un 70% de ellas ubicadas en la Región Metropolitana, un 21,6% en la Región de Valparaíso y el resto en las regiones del Maule, Los Ríos y Los Lagos, todas con un 2,7%. Además, cerca de un 85% de estas compañías integran Video Games Chile (VG Chile), la asociación gremial del sector que nació en 2011 con tan solo ocho socios. “La idea es unificar la industria y apoyar a todos los que están surgiendo”, dice Claudio Bustamante, miembro del directorio de VG Chile. “En Chile se hace de todo. Se están desarrollando juegos para todas las plataformas que existen: PlayStation 4, XboX, Switch, PC, celulares y consolas más antiguas”.
Las modalidades de juego desarrolladas en Chile son tan variadas como estas plataformas, dice Bustamante, explicando que no hay un género dominante: existen juegos de aventura, batallas, puzzles y más. Según los últimos datos manejados por VG Chile, existe un promedio de 8 trabajadores por compañía, con un 56,8% de ellas incluyendo entre 1 y 4 mujeres en sus equipos –y alrededor de un 5%, más de 5 mujeres–.
De Chile hacia el mundo
El 2018 fue un año de logros para la industria chilena: Gamaga logró ser la primera empresa local dedicada al rubro en facturar más de un millón de dólares; Tiny Bytes recibió 1,4 millones de dólares por parte de Initial Capital London Venture Partners, transformándose en la primera compañía latinoamericana de videojuegos que recibe aporte de esta entidad, y AOne Games lanzó su videojuego de batallas “Omen of Sorrow”, ganando un fondo de desarrollo por parte de Epic Games, creador del gigante y popular Fortnite.
“Con la explosión de ventas que tuvo Fortnite, Epic se pudo posicionar dentro de las más grandes marcas en el mercado del sector hoy en día”, explica Maximiliano Kübler, CEO de AOne Games, agregando que el ganar el fondo de Epic Unreal Dev Grant hoy es un reconocimiento muy importante a nivel industria –que la compañía chilena IguanaBee también ganó gracias a “HeadSnatchers”–. “Este año tuvimos la suerte de estar en el stand de Epic Games en GDC”.
Otro gran logro para la industria chilena ocurrió este año, cuando “Luna over the rooftops”, proyecto desarrollado por 4HA Games, obtuvo el reconocimiento “Best Quality of Art” –mejor calidad de arte– en los Development Awards de Game Connection 2019. “Para nosotros es un súper buen presagio de lo que puede venir hacia el futuro, porque es nuestro primer juego grande”, nos cuenta Sebastián Silva Garriga, director creativo y de Arte de “Luna”, proyecto que ha desarrollado junto a su compañero Alvaro Terifeño. Si bien el premio no implicó financiamiento, fue una excelente vitrina: “El ganar un premio como este es algo realmente importante. Pudimos tener reuniones con Nintendo, XboX, Microsoft y otros estudios con los cuales logramos acuerdos que aún están en proceso”, añade Silva.
La publicidad también juega
Últimamente la presencia de marcas se ha concentrado en los eventos masivos de Esports–o deportes electrónicos, como League of Legends– y en el auspicio de sus equipos. Si bien la publicidad se ha enfocado en el consumidor final, existe una oportunidad en el ámbito del desarrollo de videojuegos, opina Claudio Bustamante: “Hay un potencial ahí que quizás no se ha explotado. En el mercado de Estados Unidos, por ejemplo, si se lanza un juego sí da para que se asocie una marca, que hayan comerciales en la tele y más”.
De hecho, algunas ya que se han aventurado en este ámbito. Rocket League, el juego de fútbol para autos que atrajo a más de 20 millones de jugadores tras su lanzamiento –auspiciado por la marca Hot Wheels– y Doritos Crash Course, otro éxito con más de 12 millones de jugadores en XboX –lanzado por Doritos y Microsoft– son dos reconocidos ejemplos de advergames o juegos publicitarios.